domingo, 9 de noviembre de 2014

Quiero ser bombero

Esto es una prueba de lo puede mover la pasión.

Enero 1999-Noviembre 2014. Casi 16 años separan algunas de estas fotografías que ahora os muestro. Se hicieron sin polarizador entonces y hoy, a propósito, han sido hechas sin polarizador. Nikon F50 frente a Canon 6D, para quien quiera saber. Lo que ha cambiado poco o nada, son la admiración, las ganas, los sentimientos y, si quieres, a más, que es lo que cuenta.

Tenía un presentimiento. Aquel día, Fran y yo mantuvimos una charla y me dijo que llevara a mi hijo a visitar el Parque de Bomberos cuando estuviera de guardia. A Unai le entusiasmó la idea y me puso cara rara cuando le dije que Fran era un amigo mío.

Ningún amigo mío le caía bien. Solía hacer lo que estuviera en su mano para arruinarme la cita con cualquiera de ellos, del grado que fuere. Su madre era suya y de nadie más. Hasta ahí, todo normal. O no.

Prometí que le gustaría. Sabía que no me la jugaba. 

Fran le mostró el Parque de Bomberos, los vehículos, el casco, la manguera ... le habló de su trabajo ... pocos meses antes había estado auxiliando a las gentes que lo perdieron todo por culpa del huracán Mitch y estaba especialmente sensibilizado. Le marcó su vida en un antes y un después. Le corre el fuego por sus venas y las ganas de ayudar.Transmite. Y transmite bonito.

Su pasión por lo que hace a diario se la inyectó a Unai por vena. Aquél chiquillo de 6 años recién cumplidos, que hasta entonces soñaba con ser "trabajador de la tierra y los animales ya estaba abducido y sentenció que quería ser bombero y que, además Fran ya no era mi amigo, ahora era su gran amigo y sólo suyo. Me "prohibió" que dejara de mantener contacto con él, jamás. 

Para Unai, ser bombero se resume en una sóla persona, Fran y el recuerdo de aquella tarde de pasión de bombero en vena en el Parque.

Las fotos se guardaron en el álbum y entre ellas, las palabras de Unai "Con su gran amigo Fran", "Dice que, de mayor, quiere ser bombero para trabajar con su amigo Fran". Escrito está.

Días atrás, Unai me pidió volver a ver a Fran, esta vez para hablar del tema, en serio. Siempre ha sido su referente. Quiere ser bombero gracias a él, a lo que le transmitió. Y esta mañana hemos estado con él. Ha estado con él. Se hubiera quedado todo el día escuchándole. Es duro. No va a ser sencillo pero quiere. Ha salido del Parque, convencido de que quiere ser bombero.

La culpa, por supuesto, es de Fran Martínez Rivero. Su gran amigo.